7.6.08

Él vino, el vino

Entre varias copas robadas
y una mirada cercana
te encuentro en la punta
del órgano más vital.

Con vino y con carnes,
con carnes y vino,
viniste y aquí yo
para quedarme fastidiando.

Tan sólo como el soplo pequeño
que con todo el miedo a la tierra
me cae desde encima,
igual siento el rojo en mi cara.

Igual se me caen los brazos
de solo poder estirarlos
para decirte que estoy,
pero aun no puedes verme.

Ya no hay más despedidas de fiesta
que podamos concertar,
si sigo esperando celebrar,
si sigo esperando llegar,
si sigo esperando a que esperes algo de mi
y sobre todo de ti.

1 comentario:

... dijo...

Nunca habrá más de nada si se sigue esperando, y sin embargo nos pasamos la vida esperando a otro, esperándonos... hasta cansarnos... y empezar... o morir esperando.

Me gusto mucho.

Saludos

.